Los Reyes Magos recuperan su visita a la abogacía granadina para recoger los últimos deseos de los más pequeños

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Hacía dos años que los Reyes Magos no habían hecho su habitual visita al Colegio de Abogados de Granada por motivos estrictamente sanitarios. No hay que olvidar que, dada su elevada edad, forman parte de uno de los grupos más sensibles ante la Covid-19 y nadie querría que un contagio les impidiera repartir regalos la noche del 5 de enero.
 
Sin embargo, una vez que han mejorado las condiciones epidemiológicas, Sus Majestades de Oriente no dudaron en recuperar esta cita con la Abogacía granadina. Así, el pasado 4 de enero, en la víspera de su gran noche, Melchor, Gaspar y Baltasar volvieron al salón de actos de la sede de Santa Ana para recibir a los más pequeños del colectivo profesional, gracias -todo hay que decirlo- a las gestiones realizadas por el vicedecano, Antonio Mir; el diputado Tercero, Antonio Olivares; y el colegiado Luis Eduardo Gómez Quesada, “amigos íntimos” de los reales invitados.

Durante dos horas (de 12 a 14), más de 200 hijos, sobrinos, nietos o ahijados de letrados granadinos pudieron entregar sus últimos deseos a los Reyes Magos personalmente y recibir, a cambio, el recordatorio de la importancia de portarse bien y algunas chucherías para endulzar las horas de espera hasta el momento de apertura de regalos. Se recupera así un encuentro entrañable donde la ilusión y la inocencia de los menores supone un amable punto de partida para el nuevo año.